Fauda (Caos) es el relato de las victorias y derrotas de un equipo de agentes encubiertos israelíes que se infiltran de diversas y arriesgadas maneras en el complejo submundo del terrorismo islamista, para combatir a los enemigos mortales del Estado de Israel. Y lo hace de una manera realista, creíble, humanizando a los seres humanos envueltos en esa tragedia, más allá de sus banderas, y extrayendo de esas peripecias tensión dramática y gran cine. La serie no es indulgente con el islamismo, al contrario, pone de manifiesto los trituradores efectos del fanatismo, aunque algunos sectores israelíes han criticado la serie alegando que da una visión simpatizante de Hamás respecto de otros grupos terroristas en la zona.
Reconocido como Mejor Guión en el festival de Biarritz, ganador de seis premios Ophir (equivalente israelí a los Emmy) entre ellos el de Mejor Drama, Fauda ha sido un éxito comercial y de crítica en 190 países donde se ha emitido como serie desde su estreno en Netflix en diciembre de 2016.
Ayer Jueves 16 se estrenó la Tercera Temporada.
Como los buenos dramas tiene un fondo de pesimismo que no es incompatible con los gestos de nobleza de las diferentes partes, es una serie digna de ser vista que además de los dramas humanos que nos muestra nos aporta también una visión realista del conflicto político de fondo.
Los actores y actrices son magníficos. Mi preferida Laetitia Eïdo.